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ESTENOSIS VERTEBRAL

Estenosis vertebral
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La estenosis vertebral es el  estrechamiento anormal congénito o adquirido del canal vertebral. Las causas más frecuentes son las hernias, protusiones discales, artrosis facetaría y engrosamiento por inflamación o edema de los ligamentos interlaminares.

La estenosis del canal vertebral es una de las causas frecuentes de dolor lumbar y miembros inferiores. La claudicación debe orientar al clínico hacia este diagnóstico.

El paciente puede  acudir a fisioterapia por presentar dolor en las  piernas y gemelos, al tiempo que refiere fatiga al caminar y permanecer estático de pie; esta fatiga desaparece al sentarse.

Los síntomas son dolor, entumecimiento, hormigueos y parestesias  irradiadas por el territorio de la raíz nerviosa afectada.

En la exploración aparece al realizar pruebas funcionales dolor de columna lumbar con irradiación a glúteos, disminución de fuerza a la extremidad afectada y pérdida de reflejos.

La resonancia magnética orienta al médico del estado de la columna, estructuras nerviosas, músculos etc, también son de utilidad la tomografía computerizada   y la radiografía simple.

El tratamiento de elección es la fisioterapia y ha de acometerse lo antes posible para evitar el inicio de una mielonopatia lumbar. En la actualidad disponemos de un sistema de tracción computerizada para  la zona lumbar que está dando unos resultado del 90% sin necesidad de cirugía. En España se generan 650.000 consultas al año de las cuales se operan 3.400 distintas patologías lumbares. En Galicia la cirugía dependiente de la columna vertebral supone un 40% de la actividad asistencial de los servicios de neurocirugía y traumatoloía.

 

EJERCICIOS

 

1.- Tumbado hacia arriba, con las piernas extendidas, primero flexionamos  una rodilla cruzándola a  través    del cuerpo hacia el suelo; manteniendo la cabeza y hombros en el suelo. Después al revés.

2.- Sentado en el suelo, las piernas flexionadas y las plantas de los pies en contacto. Nos inclinamos lentamente llevando el mentón hacia los pies.

3.- Acostado sobre el suelo; flexionamos una pierna y levantamos la  que nos irradia el dolor. Realizar flexo-extensión de tobillo repetidamente.

4.- Sentado; con la ayuda de una toalla  para tirar de los pies. Traccionamos progresivamente de la toalla desplazando la cabeza hacia los pies.

5.- Realizamos series de  sentadillas deslizando la espalda contra una pared. (Descendemos hasta donde nos encontramos con fuerza para ascender).

 

Si padeces los síntomas detallados, no dudes en contactar con nosotros. Aplicaremos la terapia necesaria para su eficaz tratamiento.

 

-Un artículo de José Manuel Vázquez ‘Casiano’-

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